Cada mujer vive su maternidad de maneras distintas y en situacio-nes diferentes. Es la experiencia más poderosa que puede llegar a vivir una mujer.
A Roseta Bordanea (33) se le reconoce por su sonrisa franca que acompaña de una personalidad amis-tosa y espontánea. Esta colonense creció hasta los 18 años en el sector de Buena Vista, en una finca a orillas de la carretera Transístmica, donde “disfruté de una niñez maravillosa rodeada de la naturaleza y el cariño de mi familia. Soy la benjamina, la más pequeña de 5 hermanos”. Una vez culminada su educación secundaria, se muda a la capital para iniciar la universidad.
¿Cómo decidiste estudiar Comunicaciones?
Desde que tenía 3 añitos me ponía frente al espejo con un cepillo de cabello, soñando que era presen-tadora de televisión. A los 12 años me topé con una carpeta de la USMA con el programa de carreras, vi Ciencias de la Comunicación Social, le consulté a mi papá y me interesó mucho. Afortunadamente no me equivoqué, porque mi profesión me ha dado grandes satisfacciones.
¿Desde siempre sabías que te querías dedicar a este campo?
Sí, totalmente. Con decirte que hasta me ponía detrás de la tele de la sala, emulando a los presen-tadores y le preguntaba a mi mamá si me veía en la pantalla jajajajaja, obvio, yo con 5 años juraba que así se hacía televisión y que las personas estaban dentro de esa caja.
¿Cómo fueron tus primeras experiencias en tele-visión?
Emocionantes. ¡Todo era novedad para mí! Tenía 18 años, estudiaba tiempo completo y trabajaba tiempo completo. Ponía en práctica absolutamente todo lo que aprendía en la U y viceversa. Inicié en 2007 como reportera del programa Tu Mañana, al año y medio de estar allí me dieron la oportunidad de ser la conductora del segmento de espectáculos del noticiero Telemetro Reporta y en 2012 me inte-gré nuevamente a Tu Mañana pero esta vez como presentadora, hasta que a finales de 2015 renuncié por motivos de mudanza internacional, ya que mi esposo trabaja en una multinacional y lo trasladaron a México. Retorné a las pantallas en enero de 2019 como anchor del Morning Show JELOU en mi nueva casa TVN Panamá donde he tenido experiencias gratificantes.
¿Qué te ha enseñado el campo de la comunicación en televisión?
A conectar con la audiencia, conocer personas increíbles, a ser objetiva, imparcial, a proyectar mi esencia, a entretener, informar, hacer docencia, ser la voz de otros, expresar el sentir del pueblo, exaltar las artes, enaltecer la cultura, hacer click con la gente y que ellos nos cautiven con su magia.
¿Cuáles han sido los retos más importantes en tu profesión?
Hacer coberturas internacionales, entrevistar a acto-res y actrices tanto de melodramas mexicanos como de telenovelas colombianas, actores y actrices de Hollywood, también del cine iberoamericano y artistas de la industria musical latina y anglosajona.
En el marco del Día de la Madre ¿cómo era la relación con tu mamá?
Mi relación con mi mamita fue corta pero bonita. Ella me tuvo a los 42 años de edad y a pesar de salir a trabajar diariamente por largas jornadas, siempre, al retornar a casa, me dedicaba tiempo, jugaba conmigo, me cantaba y me leía cuentos sin impor-tar qué tan cansada estaba. Me crió en un mundo musical, muy infantil, rural, con valores y muchísimo amor. Siempre viendo el lado bueno de la vida, sin saltarme ninguna etapa y todo a su debido tiempo. Ella enfermó cuando yo tenía 10 años, dormí con ella en su habitación hasta los 14 años y murió cuando yo era una quinceañera.
Ahora que eres madres ¿cómo es la dinámica con tus hijos?
Gracias a Dios y a La Guadalupana, con ambos hijos he logrado construir una relación muy profunda, un vínculo preciado y una conexión maravillosa. Tengo 2 varones, Eduardo Gael de 4 años y medio y Jordi Manuel de 6 meses. Parto natural sin epidural, ape-go temprano, lactancia materna exclusiva y a libre demanda, colecho, crianza en brazos, porteo seguro, disciplina positiva, crianza respetuosa, estimulación temprana y prohibición de exposición a pantallas.
¿Qué has aprendido en tu rol de madre?
No existe un manual de instrucciones para ser mamá. La madre perfecta no existe, pero cada madre es perfecta para su bebé. Cada mujer vive su maternidad de maneras distintas y en situaciones diferentes. Es la experiencia más poderosa que puede llegar a vivir una mujer.
¿Cómo balanceas tu tiempo entre el trabajo y la familia?
Como una malabarista. Es muy difícil ¡pero se logra! El trabajo en equipo es clave y la red de apoyo en casa es esencial. Me organizo, hago constar que no soy la persona más ordenada, me considero ¡espíritu libre! Me planifico con mis asignaciones laborales, compromisos comerciales y vida familiar para cum-plir con mis responsabilidades de ambas facetas y roles. Me toca ser muy disciplinada para madrugar, llegar al canal puntual, presentar JELOU, buscar a mi hijo a la escuela, regresar a casa, amamantar al bebé, grabar, dedicarme a mis princhis el resto del día y compartir con mi esposo.
