Con su espíritu innovador y su pasión incansable, la panameña Yaremi Greig está preparada para conquistar el escenario internacional y dejar en alto el nombre de Panamá en el World Class Competition 2024. 

Por Valentina Jiménez  Fotos cortesía DIAGEO

 

Las mujeres son imbatibles en las más diversas profesiones. No hay barreras que impidan el arrollador avance de las damas en Panamá. Una muestra de esa fuerza imparable es Yaremi Greig, quien representó a nuestro país en la final global del World Class Competition 2024, evento internacional que ocurrió del 7 al 13 de septiembre en Shanghái, China.

Sí, Yaremi dejara en alto el nombre de Panamá en el World Class Competition, una de las competencias más exigentes y conocidas que existen dentro de la coctelería a nivel mundial. 

Explica:“Estoy trabajando en una nueva técnica que representa un avance significativo en mi desarrollo como bartender, y me he sumergido en la cultura ‘Hai Pai’ de Shanghái para incorporar elementos únicos y auténticos en mis cócteles”, comenta Yaremi. 

Comenta que el término ‘Hai Pai’ describe un estilo cultural único de Shanghái, conocido por integrar y adaptar distintas influencias culturales. Esta fusión es el eje central de la preparación que está ideando Yaremi, quien está decidida a crear cócteles que reflejen tanto la autenticidad panameña como la riqueza del quehacer cultural de la ciudad china más grande de todas.

Yaremi enfrenta los retos de su trabajo de una manera integral, donde cuerpo y mente están en permanente sintonía. “Mantengo una rutina de ejercicios y practico la meditación para estar en mi mejor forma. Esto me ayuda a mantener la calma bajo presión y a enfocarme en lo que realmente importa: la creatividad y la ejecución impecable”, anota.

Haciendo historia en nuestro país

Yaremi Greig conoce y práctica en su oficio una filosofía de vida profesional marcada por la excelencia y la creatividad, elementos esenciales de su personalidad y talento, distintivos que la llevaron a convertirse en la primera mujer en ganar el título de Bartender del Año en Panamá, un reconocimiento que llegó en el duodécimo año de la competencia World Class en el país.

Esa distinción marca un antes y un después para que otras mujeres ganen cada vez más terreno en la mixología. Este crédito histórico que tiene a su favor le permite brillar con luz propia durante el desarrollo del World Class Competition 2024, donde midió su ingenio con los más destacados bartenders del mundo.

Su pasión por la mixología

“El desafío es llevar el carisma de las mujeres, involucrado con el servicio, crear esa lealtad en el cliente, sumado al conocimiento que tengas, cómo te preparas, investigas, cómo te relacionas con las personas, tienes que ser dinámico, saber un poquito de todo”, resalta Yaremi Greig sobre la relación que existe entre el bartender, el trago que elabora y el destinatario de sus creaciones: el consumidor, quien desea transportarse a otros territorios a través de los sabores de un buen cóctel.

La formación y el aprendizaje continua son sus fortalezas más importantes, ya que inició con cursos básicos (INADHE, Learning for Life) hasta ir alcanzando lo excelso. “Practiqué, estudié, conociendo sobre el servicio básico en general”. 

Dentro del medio, confiesa que le gusta “el desarrollo de productos, conocer una etiqueta”. De esta manera, cuenta que desarrolló “una pasión por la mixología, por las bebidas en general, porque mixología no es solo bebidas alcohólicas, sino bebidas sin alcohol, bebidas de infusiones, café”.

Cultivar relaciones, crear una red de contacto, la empatía y las habilidades sociales han sido fundamentales: “Cuando trabajas en el circuito de restaurantes y bares, vas conociendo poco a poco a los gerentes de marcas, a los embajadores, poco a poco a todo el gremio y cuando desarrollas ese tipo de relaciones vas conociendo sobre las marcas, sobre el proceso de cada una y eso te ayuda a llevar una mejor experiencia personalizada a los clientes”.

La coctelería mundial está de fiesta 

El World Class Competition 2024 ubica a Shanghái como el epicentro global de la coctelería, acogiendo a los más relevantes bartenders de más de 60 países, entre ellos, a Panamá de la mano de Yaremi Greig.

Los participantes se enfrentaron a un conjunto de retos diseñados para poner a prueba su dominio de las técnicas tradicionales y vanguardistas de la coctelería, desde la creación de cócteles clásicos hasta innovadoras presentaciones que desafían las normas del sector. 

“Competir en World Class es una oportunidad única para mostrar la riqueza de nuestra cultura y creatividad en un escenario global”, afirma emocionada Yaremi. 

Su participación en este certamen tiene un impacto positivo tanto para su carrera como para la evolución de Panamá en materia de mixología, ya que vamos a trascender las fronteras más exigentes de la coctelería internacional. Porque no solo significa una hazaña individual para nuestra digna representante, sino que también eleva el perfil de la coctelería panameña en la escena más allá de nuestra región. 

Sin duda que la historia de Yaremi inspira a nuevos talentos, especialmente a las mujeres a que rompan todas las barreras en una industria tradicionalmente dominada por hombres. 

“Quiero ser un ejemplo para las futuras generaciones de bartenders, demostrarles que no importa cuán difíciles sean los desafíos, con dedicación y pasión, todo es posible”, agrega Yaremi. 

Una experiencia transformadora 

En su viaje hacia Shanghái, Yaremi Greig ha contado con el apoyo incondicional de Diageo Centroamérica y Caribe, cuyo compromiso ha sido clave en su preparación. “Cada persona de Diageo ha sido fundamental en mi desarrollo, brindándome el apoyo necesario para perfeccionar mis técnicas y tener la confianza para representar a Panamá en un escenario tan importante”, asegura.

Yaremi sabe que estar en el World Class Competition será una experiencia única no solo para su cada vez más amplia hoja de vida, sino que también será otro escalón más que subirá en su crecimiento tanto profesional como personal. “Estoy emocionada de aprender de mis colegas de todo el mundo. Este intercambio de ideas es invaluable y me permitirá expandir mi visión sobre la coctelería y seguir innovando”.